Por: Guillermo Colín
Todo comienza el 28 de diciembre de 1895 en el número 14 del Boulevard de los Capuchinos en París, en el Salón indien del Grand Café los hermanos Lumière presentaron su gran invento al mundo, el cinematógrafo. Con el éxito de esa primera función los Lumière comenzarían una gira por todo el mundo para presentar su producto y México era el primer destino que tenían dentro del continente americano.
El cinematógrafo llegaría a nuestro país solo 8 meses más tarde, los Lumière mandaron a los hermanos Vayre para enseñar a los mexicanos lo que se podía hacer con su nuevo invento y así fue. Un 6 de agosto de 1896 en una sala del Castillo de Chapultepec se daría la primera presentación de cine en el continente americano, aquella fue privada, el único presente en aquel lugar era el presidente Porfirio Díaz, pero tan solo unos días más tarde, el 14 de agosto en el sótano de la droguería Plateros, se daría la primera función pública, con ella comenzaría la aventura que es el cine mexicano.
Los hermanos Vayre no solo vinieron a México a presentar el producto, también graban 35 cortos aproximadamente, destacando “Un duelo a pistola en el bosque de Chapultepec”. Ellos no fueron los únicos que graban en el país en aquella época silente, también mexicanos como Salvador Toscano, Enrique Rosas, Guillermo Becerril o los hermanos Alva, que adquirieron su cinematógrafo, comienzan a grabar y a presentar sus filmaciones al mundo.
De la época silente poco queda, actualmente solo se conservan tres películas: “El puño de hierro”, “El tren fantasma” y “Tepeyac”. Del año 1896 al 1930 hay muy pocos registros de lo que se filmó, pero justo a finales de 1930 un evento marcaría la historia del cine nacional, el 17 de diciembre llegaría a México uno de los personajes que más ha contribuido al cine, Sergei Eisenstein. El cineasta nacido en Rusia era admirador de los grandes muralistas mexicanos y es con la intención de conocerlos que viene a México, además de filmar una película que nunca terminó pero que años más tarde se estrenaría, “¡Qué viva México!”.
En su visita Sergei viene con Grigory Alexandrov, su co-guionista y Eduardo Tissé, su cinefotógrafo. Los tres conocerían a Emilio “el Indio” Fernández y Gabriel Figueroa quienes serían sus discípulos durante su estadía en el país y que años más tarde se volverían un estandarte del cine mexicano produciendo grandes películas. Con aquella visita los cineastas mexicanos aprendieron a dominar el lenguaje cinematográfico que ocuparían para contar las grandes historias que ya estaban escribiendo guionistas de la talla de Matilde Landeta, Luis Alcoriza o Fernando de Fuentes, es así como en 1936 con la película “Allá en el rancho grande” iniciaría la época más gloriosa del cine nacional, la época de oro.
Solo faltaba un factor más para que el cine en nuestro país despegara a nivel mundial, la inversión. No tardó mucho para que llegara, con la entrada de Estados Unidos a la segunda guerra mundial Hollywood vio en México un lugar para producir buenas películas, fue entonces que los estudios gringos comenzaron a financiar nuestro cine para hacerlo más grande que nunca.
Aquellos años fueron gloriosos para el cine nacional, el melodrama y el sentimentalismo acompañaría a todas las familias mexicanas con películas como: “La perla”, “María Candelaria”, “Escuela de vagabundos”, “Nosotros los pobres” o “Campeón sin corona”. Estos filmes no solo eran entretenidos, también eran reconocidos por la crítica cinematográfica, nuestro cine era la sensación a nivel mundial. Este éxito trajo a México a otro gran cineasta, Luis Buñuel. El español llegaría en 1945 y es en el país donde aseguraría su lugar en el olimpo del cine con películas como: “Los olvidados”, “Él”, “Viridiana” o “El gran Calavera”.
Durante dos décadas el séptimo arte fue la segunda principal industria del país, se llegaron a producir hasta 90 películas al año, pero como todo lo inicia tiene que terminar el año de 1957 marcaría el fin de una era y es con la muerte del ídolo Pedro Infante y con el cierre de tres estudios cinematográficos: Tepeyac, Azteca y CLASA Films que la época de oro terminaría, a esto sumándole que Hollywood retiro la inversión, pues con el fin de la guerra dejarían de financiar el cine mexicano para desarrollar su propia industria fílmica.
![](https://static.wixstatic.com/media/1b4366_20f65d637f7f41e59ccce8ef53e80926~mv2.jpg/v1/fill/w_980,h_981,al_c,q_85,usm_0.66_1.00_0.01,enc_auto/1b4366_20f65d637f7f41e59ccce8ef53e80926~mv2.jpg)
Comments